viernes, 6 de marzo de 2009

El proceso creativo



Para muchos artistas el resultado final de su obra no tiene mayor importancia. Lo que realemnte cobra valor es el proceso creativo.

Como mejores ejemplos tenemos a Jackson Pollock o Yves Klein.

La técnica del primero es quizás más conocida. Pollock se emborrachaba y drogaba, cogia sus tubos de pintura y los esparcía por un gran lienzo que previamente había tumbado en el suelo. Luego iba el turno de los grandes botes agujereados que sujetaba en sus manos y con los qeu bailaba en el máximo apogeo de su estado de embriaguez y drogadicción. por último tomaba sus pinceles manchados con gran cantidad de pintura y los sacudía sobre el lienzo. Para terminar levantaba el lienzo y dejaba que la pintura escurriese libremente. Es el sumum de la expresión de un artista, del reflejo de lo que siente, a la hora de pintar. Quería que su obra impactase. Era algo nunca antes hecho. Como ya hemos hablado en otras entradas del blog, su obra impactó, y tanto impactó que no paró de reproducirse, acudían en colas a exposiciones para verlas, se escribían artículos y artículos en revistas,... hasta que al final dejó de impactar. La gente se acostumbra a lo que ve, y la intención de su obra se onvertió en su máximo enemigo. Pollock terminó suicidándose ante tal catástrofe a su parecer.

Yves Klein era algo más espectacular, de hecho, eso es lo que hacía, ESPECTÁCULO. Klein es sobretoo famoso por su "azul klein". Ese azul eléctrico y llamativo tan peculiar. Bien, pues su proceso creativo consistía en vestirse totalmente de este color, llevar uno o varios múscios también totalmente vestidos de azul y que tocaran en la sala de un museo, o de su estudio donde había un lienzo en la pared. Mientras cantidad de espectadores presenciaban la escena, tomaba a mujeres desnuda y las pintaba POR COMPLETO de su "azul Klein". Ellas danzaban con la música y en un punto del baile se enfrentaban al lienzo en blanco, dejando la marca de sus cuerpos, de la música, del ritmo y del ambiente, plasmado en la tela.

Esto lleva, como la mayor parte del arte del momento, a la constante duda de los espectadores de una obra. ¿Es arte? ¿Se merecen ese reconocimiento? En el caso de Pollock ¿Puede considerarse un genio original o un drogadicto? De esto ya hablamos una vez, pero ¿Y Klein? ¿Es él el artista o lo son estas chicas danzarinas? ¿O quizás lo sean los músicos? ¿Nos toman el pelo?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

De hecho creo recordar (también gracias al gran Aranda) que Pollock grababa vídeos de cómo hacía sus cuadros... no hay ninguno por ahí?

Agueda Beatriz Esteban Gallego dijo...

Los vídeos reales no me gustan mucho... pero hay uno fragmento de la película sobre su vida que se ve más o menos bien lo que explico...

http://www.youtube.com/watch?v=vy6Omz1bDPg&NR=1

Anónimo dijo...

bea...voy a intentar no kedar d friki empollón pero lo cierto es que las obras de mayor prestigio de Pollock, las realizadas entre 1947 y 1950, como Ritmo de Otoño o Lavender Mist, las pinta completamente sobrio y aislado de la vida en la ciudad en una casa de campo a la que se trasladó con Lee Krasner. Además tampoco se suicidó literalmente...más bien cogió el coche completamente borracho cuando en los cicuenta recae en el alcoholismo y con ello su obra pierde toda su vitalidad.

Bueno...que lo siento...pero es que soy muy friki de Pollock.

:$